PREGUNTAS FRECUENTES
FALTA DE PERSEVERANCIA
Lo pongo en mayúsculas para subrayar su importancia.
En gran medida está causada por la dificultad que tienen los pacientes de aceptar que la causa de la eyaculación precoz es de orden psicológico.
Simplemente, no creen en la terapia que se propone y no la siguen.
En realidad sabemos que entre un 90 y un 98% de los casos de eyaculación precoz la causa es psicológica, pero no podemos determinar con precisión las razones.
A los profesionales de la salud nos cuesta aceptarlo, pero la mente es una gran desconocida.
Lo que si sabemos es lo que nos dicen los datos; la Terapia Sexual, también llamada Cognitivo-Conductual, funciona.
Es, con mucha diferencia, el tratamiento más importante contra la eyaculación precoz en todos los países avanzados.
La dificultad es que no es cuestión de tomarse una pastilla como si fuera un asunto orgánico.
Conlleva una dedicación diaria durante semanas, porque la reprogramación mental que supone la terapia necesita tiempo.
En resumen: El principal obstáculo para terminar con la eyaculación precoz es la dificultad de aceptar que esta disfunción tiene una causa psicológica y que revertirla requiere perseverancia.
Una vez descartadas las causas orgánicas (muy infrecuentes) y los casos de personas en tratamiento psiquiátrico o psicológico o con problemas de adicciones, la experiencia nos dice que el principal factor para la corrección de esta disfunción es la constancia en el seguimiento de la terapia.
Cada persona reacciona de forma diferente. Solo podemos hablar de duración mínima; 40 días.
Aunque en algunos casos se aprecian mejoras significativas durante la primera mitad del programa.
Se propone un calendario de ejercicios. Recomendamos seguir las instrucciones, pero lo puedes adaptar a tu agenda. Los ejercicios requieren poco tiempo, lo importante es la constancia.
No es parte del programa que proponemos.
Los fármacos, como la dapoxetina o los geles retardantes, tienen su espacio en el tratamiento de este problema, pero hay que tener en cuenta que nunca son la solución definitiva.
La columna vertebral de cualquier tratamiento es la terapia sexual.
Únicamente así se consigue alcanzar una grado de dominio satisfactorio, independiente de factores externos.
Durante las primeras fases del programa, una “ayuda” fácil de encontrar y asequible, que recomendamos durante la ejecución de los ejercicios de masturbación, es el uso de preservativos con retardante. Al efecto anestésico de la benzocaína se suma el aislamiento que produce el látex.
Las técnicas están orientadas a desarrollar el conocimiento y el control de los mecanismos que se ponen en marcha durante la eyaculación. Se complementan con ejercicios de relajación y tonificación de la musculatura implicada.
Solo en caso de que lo solicites se planificaran consultas online en directo.
No. El proceso que se propone para corregir el problema es el mismo.
No, pero en la segunda parte del mismo recomendamos ejercicios para realizar con una pareja y ganar confianza. Se sugieren otras variantes como el uso de masturbadores masculinos, baratos y ampliamente disponibles.
No. La impotencia es la incapacidad de lograr o mantener una erección suficiente para una actividad sexual satisfactoria.
Nuestro programa no presenta complicaciones ni efectos secundarios. Los obstáculos son de orden psicológico, y tienen que ver sobre todo con el reconocimiento del origen del problema, la ansiedad, la impaciencia, y la falta de seguimiento de las pautas indicadas.
No, llamamos orgasmo a las sensaciones que se producen en el cuerpo cuando se alcanza la eyaculación.
Es posible eyacular sin sentir todo el placer que genera un orgasmo, al igual que se puede alcanzar el orgasmo sin eyacular.